Casi que me siento mal por escribir sobre esa maravillosa serie llamada The X-Files luego de tantos meses de mi último posteo sobre ella y que sea una crítica mala, especialmente luego de haber vivido de la mano de Mulder y Scully una infinidad de capítulos grandiosos, por eso prometo apenas termine de verla por completo (not long now) hacer un post lleno de alabanzas, porque definitivamente se lo merece. Por ahora me limito a comentar las impresiones que me dejó la octava temporada, esa que marcó, para mí, el fin de un ciclo y un quiebre en la mitología luego de siete años.
Antes que nada tengo que decir que, antes de empezar la octava temporada, ya más o menos Doggett ni siquiera me cae mal, al contrario, trata de ayudar, hace lo que puede teniendo en sabía lo que pasaba gracias a los spoilers de los que, sin querer, fui enterándome a lo largo de los años y de los últimos meses. Puede que eso haya influído para que viera esta temporada sin tantas ganas, o quizás la razón también sea que, desde mi punto de vista, la serie empezó a derrapar en esta instancia. Hasta la séptima temporada (pero más específicamente hasta la sexta) The X-Files fue siempre una serie que me enganchó como pocas, poquííísimas otras, y realmente llegué a entender por qué es un programa de culto y por qué los Xphilers tienen tanto nivel de obsesión/fanatismo inclusive hasta el día de hoy, porque yo misma enloquecí con la historia en general. Sin embargo, con la octava temporada hubo un quiebre, y no me quiero imaginar lo que debe ser la novena (sumen la cantidad de malos comentarios que he oído/leído en los últimos meses). Primero y principal, y lo más obvio: falta Mulder. ¿Cómo pueden seguir X-Files sin Mulder? Si al fin y al cabo la serie giraba en torno a él y su búsqueda de «la verdad». A mí Scully me parece una grossa, me encanta, pero claro, le falta Mulder. Bah, a la serie le falta Mulder. Ahora Scully empezó ocupar un poco el rol de creyente de su compañero y John Doggett, el nuevo agente asignado a los X-Files, el de ella, pero igualmente no funciona, no hay caso. También por todo esto sentí que los capítulos fueron perdiendo el «espíritu X-Files» que tuvieron desde el principio. No es que hayan sido particularmente malos (o al menos no todos ellos) pero… falta la química, falta todo lo que significó la serie con sus protagonistas en las temporadas anteriores. No quiero quedar como una talibán de Mulder, entiendo que Duchovny se haya querido ir después de tanto tiempo y que los guionistas hayan hecho lo posible por encarar la serie desde otro lado, pero no funcionó, no me convence.
(más…)
Read Full Post »